El coro de la basílica es una de las joyas de la misma, que destaca no solo por su belleza también por su crucería tan rebajada que desafía las leyes arquitectónicas en especial las góticas. Fue realizado por arquitecto local Pedro Segarra.
En el trascoro se aprecia la belleza de la crestería de grumos. En su primer friso presidido por Jesucristo en plan juez con la Virgen a un lado y San Juan al otro junto al resto de los apóstoles. En el segundo se ve al arcángel San Miguel pesando las almas colocando a su derecha los que alcanzan la salvación y a su izquierda a los que les espera el fuego eterno.
En la información de la basílica encontré que tiene en sus teclados 47 notas, 49 registros en el gran Órgano, 21 en el órgano de cadireta o positivo y 3693 tubos.
Decorando el cuarto de bóveda que se encuentra sobre el órgano vemos una Trinidad.
Si alguna parte de la basílica te hace fijar el ella al entrar esa es la escalera que circunvalando una de las columnas que soportan el coro entre otras cosas, fue construida por Antonio Sancho en el siglo XV.
En la barandilla de abajo arriba tenemos representada la adoración de los Magos y los pastores. En el resto de escenas hasta llegar a estas vemos la genealogía de Jesucristo.
El vuelo de la misma esta decorado con motivos vegetales y animales. También se puede ver el rostro de una persona humana que puede ser el autor de las escenas de la barandilla el italiano Giuseppe Belli y quizás esta decoración.