Si la sala anterior estaba dedicada a un insigne hijo de Ciudad Rodrigo esta dedicada a un personaje entre real e imaginario se trata de un ciego llamado Sabino, que no solo tiene dedicada esta sala también tiene una calle.
La tradición oral nos ha traído este personaje. Esta tradición nos dice que durante el asedio de las tropas francesas a la localidad el año 1810 en la que Sabino con su perro lazarillo llevaba munición a los combatientes y consolaba a los moribundos. Si para un con visión normal es peligroso imaginemos a un invidente.
En la sala vemos unos dompedros de diversos diseños, el mas original es aquel fabricado con una banqueta igual a la que mi vecino usaba para ordeñar las vacas antes de comprar la ordeñadora mecánica.
Los orinales con esos letreros los vemos junto otro de cristal y una escupidera. En la pared vemos un cuadro donde se ven diseños de utensilios para uso femenino del siglo XVIII.
Estos dos últimos orinales del que primero de ellos le vemos decorado con imágenes circenses al estar destinado para su uso infantil.
Originally, I thought these were for evacuation of bowels. Then they were used to milk the cow? The urinals look so sophisticated in the last two shots
ResponderEliminarHe estado leyendo...y sobre todo "viendo" todas las entradas que has colgado al respecto. Muy buenas, pero, por cuestión de tiempo, no he podido comentar. Ahora lo hago para decierte que cada vez que veo esto me doy cuenta de lo afortunado que somos nosotros...de verdad
ResponderEliminarBoa tarde meu amigo Tomás. Museu rico e muito interessante. Parabéns pelo seu trabalho e matéria.
ResponderEliminarFabulosa inspiração :))
ResponderEliminar-
Coisas de uma Vida...
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Beijo. Boa tarde de Feriado!
No me imaginaba que existiera un museo del orinal, la verdad es que algunos son de lo más preciosos en su decoración y, muy divertidos los del letrero, el último si que recuerda al refresco que piensas. Gracias por compartir.
ResponderEliminarUn abrazo.
De todas las formas y colores.
ResponderEliminarSi, un refresco conocido, ja, ja.
Saludos, buena noche.
Genial museo. Buenas piezas, te mando un beso.
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo los de esta entrada, por lo toque de humor que hay en algunos de ellos, incluido ese de la marca de refrescos, pero sobre todo, por los motivos decorativos que hay en la mayoría de ellos, y que hacen de estos orinales auténticas obras de arte.
ResponderEliminarUn saludo, amigo Tomás.
Me gustó esta sala. Besos.
ResponderEliminarLos mensajes de algunos no pueden ser más reales :)) Buena imaginación.
ResponderEliminarUn abrazo.