El día 8 de septiembre a las 10:30 se concentraron en la Plaza Vieja un grupo de Pendones (antiguas banderas) concejiles, creo recordar unos 40. Un buen numero de ellos de la comarca de Saldaña, del alto Carrión, de la Valdavia, Valle de Santullán y creo no olvidarme de ninguno. De fuera de Palencia la mayor parte de la zona del Cea y Valderaduey de la provincia de León, por cercanía geográfica y también relación histórica y de la provincia de Burgos dos.
Acompañaron la subida hasta la ermita los campaneros Villaltanos y el grupo de dulzaineros locales Vino Aquilino.
Las campanas fueron fundidas en la empresa Campanas Quintana, la cual tiene hoy su sede en el polígono de Saldaña, pero anteriormente en esa localidad. Pero tiene una larga historia ya que la primera campana que se conoce fue fundida por un miembro de esta familia esta en la iglesia de Lerga en Navarra, esta fechada en 1637 por Clemente Quintana e Isla que procedía de la comarca de Trasmiera en Cantabria.
Una vez presentados los pendones y el saludo del señor alcalde comenzaron el camino hacia la ermita, según subía haciendo fotos les comentaba a los pendoneros que no me parecía el recorrido mas optimo ya que a los cables aéreos de electricidad o teléfono se sumaban las líneas de banderines lo que les hacía hacer en demasiadas ocasiones la labor de esquivar los obstáculos.
Estas tres personas son de una de las localidades burgalesas cuyo nombre es Villorejo cercana a Villadiego.
El grupo de personas con camiseta naranja son los otros burgaleses en concreto de la localidad de Isar.
Algunos como se puede ver esquivaron alguno de los obstáculos, aunque tengo que decir que este es el de mayor tamaño y buena parte lo trajeron al hombro.
En el camino me encontré con una niña de la zona de Valderaduey que me extraño no estaría en clase, ya que comenzaban ese día las clases, me contesto que como era el primer día.
El pendón de la localidad de Ledigos al encontrarse en el denominado Camino Frances porta una concha de viera.
También pude observar compañerismo ya que si alguien necesitaba un relevo y no había en su grupo le cogía otro del mas cercano físicamente.
Buona giornata!
ResponderEliminarTomás, tu entrada de hoy es una joya de sensibilidad documental. Me ha conmovido especialmente la imagen en la que los pendoneros esquivan cables y banderines durante la subida a la ermita. Tú mismo comentas que “no me parecía el recorrido más óptimo”, y sin embargo, esa escena revela algo profundo: la perseverancia de quienes portan los pendones, el respeto por la tradición incluso cuando el entorno moderno impone obstáculos. Es casi un símil de cómo la memoria popular se abre paso entre los pliegues del presente.
ResponderEliminarTambién me ha gustado mucho el detalle del pendón de Ledigos con la concha de vieira, símbolo del Camino Francés. Ese gesto sencillo une lo local con lo universal, y tú lo captas con la delicadeza de quien sabe mirar más allá de la superficie.
Gracias por tu mirada, por tu constancia, y por seguir hilando relatos donde otros solo ven imágenes.
Tu blog es un archivo vivo de lo que somos.
Un fuerte abrazo.