Belenes Franciscanos; Palencia.

  Estos Belenes estaban expuestos el año pasado en el centro cultural provincial de la ciudad de Palencia.

  Aquí tenemos representada la vocación de San Francisco que siendo joven salió a meditar al campo en las afueras de la ciudad de Asís en un paraje idílico en el cual existía una pequeña ermita semi derruida. Esta pequeña ermita pertenecía a los Canónigos de la Catedral pasando a orar ante la cruz. Estando orando escucho una voz que le pedía "Francisco vete y repara mi casa, que, como ves esta a punto de arruinarse toda ella" y quedo en estasis.

  No era este edificio al que se refería la voz que debía arreglar si no la "Iglesia" que fundo Cristo. Pero Francisco se desplazo a una ciudad cercana y vendió unas cuantas pertenencias incluido el caballo en el que realizo el camino. 

  Con el dinero obtenido regresa a Asís y se lo ofrece a un sencillo sacerdote para reconstruir el templo y lo que sobre para los pobres. El clérigo por miedo al padre de Francisco lo rechaza, pero él se lo lanza por una ventana.        

   Aquel pequeño templo dedicado a San Damián disponía de una cruz del siglo XII que como vemos en la reproducción sita en la foto inferior es muy diferente a las que estamos acostumbrados. 

  El año 1212 el obispo Guido cede a Clara y sus primeras compañeras la iglesia y edificios adyacentes para que desarrollasen el tipo de vida evangélica al modo de Francisco.  

   Francisco tres años de su muerte decide hacer el castro de Greccio con la mayor solemnidad, la memoria del nacimiento de Jesús, para excitar la devoción de los fieles. Esto fue el año 1223 pero antes pidió permiso al Papa ya que era una novedad. Para ello hizo preparar un pesebre con el suficiente heno y se hizo con un buey y una mula. 

  Aquella celebración no solo llegaron los frailes de la congragación franciscana también multitud de personas del lugar resultando una ceremonia no solo solemne también esplendida. 

   El lugar donde se celebro por primera vez el rito de conmemoración del nacimiento de Jesús fue la cueva de  Greccio una pequeña localidad entre Asís y Roma. En el lugar se levanto un modesto convento del que nos queda poco tras las sucesivas ampliaciones. El lugar se encuentra situado como a unos dos kilómetros de la población.