Los Arcos; Navarra.

  Lo primero que me hizo fijarme en ella fue la torre de su iglesia de Santa María considerada la mas hermosa del renacimiento navarro. 

  Desde la zona cercana al río es donde se observan a la perfección sus dos primeros cuerpos cúbicos  y un tercero con contrafuertes cilíndricos y su ventanales con arco de  medio punto para alojar las campanas.

  El ultimo de los cuerpos con una clara influencia gótica en su construcción.

  Nos adentramos a la plaza donde se encuentra el pórtico de la iglesia por la puerta de Castilla sobre la que se puede ver el escudo del rey Felipe V.

  En el pórtico norte situado destaca su portada plateresca confeccionada  como un retablo con figuras simbólicas y escenas historiadas. Las arquivoltas fueron sustituidas  por una especie de artesonado donde nos encontramos al redentor los doce apóstoles dos profetas mayores y cuatro menores.

  La portada fue construida en el siglo XIX  con un gran clasicismo y si nos fijamos fue usada como lugar de enterramiento y al fondo vemos un crucificado sobre el cual vemos una ascensión de Jesús al cielo entre dos ángeles.
  Debido al horario de apertura no pude acceder al interior al no poder ajustar con los que debía de cumplir.

  En el paseo por la localidad nos podemos encontrar bellos edificios algunos palacetes como aquel que alberga el ayuntamiento que procede del siglo XVIII.

  En el siglo XVIII que fue la época de mayor esplendor de la villa en una mejora urbanística el maestro de obras Juan de Angós ubica a la perfección el "Portal de Dinero" también le denomina "Portal de la fuente nueva".
  Se cree que la denominación de portal del dinero se podía deber al encontrase en sus cercanías a la casa donde se pagaba el impuesto al sostenimiento tanto de culto como del clero.

  En una de sus plazas me encontré el siguiente cartel dividido en dos partes elaborado parece ser por dos niñas una llamada Gadea y la otra María.
  La parte de la primera nos recuerda que si no queremos ver la plaza sucia usemos los lugares adecuados a cada residuo.
  En la segunda parte nos dice que no nos gusta pisar los excrementos de las mascotas  y sus dueños deben recoger.