Retrocediendo un poco mis pasos me adentro en el casco antiguo por la denominada puerta del Postigo, a mi izquierda bajo dos almenas situadas entre la iglesia y la muralla veo unos arcos estilo gótico dejando paso bajo ellas.
Siguiendo la calle por la que entramos encontramos esta casa que quizás tubo algo que ver con los agustinos por el escudo y así llegamos a su iglesia dedicada a Santiago y San Ginés de Arlés.
Frente a la iglesia tenemos la conocida como torre de las campanas del siglo XVII y cerca se encuentra la antigua cárcel real que asido utilizada para varias cosa desde que dejo de ser cárcel entre otras de colegio, hoy es un centro hostelero y venta de artículos de recuerdos.
Esas piedras proporcionan excelentes texturas a las fotografías.
ResponderEliminarBesos
Como buena seguidora que eres bien sabes que este tipo de construcciones me apasionan.
EliminarSaludos.
Hola, Tomás. Precioso lugar, y magníficas las fotos. Por esos postigos he de suponer que tuvo que estar en otra época esta villa o ciudad, totalmente amurallada.
ResponderEliminarUn saludo.
Manuel, conserva prácticamente toda la muralla, no en el estado original pero bastante bueno ya que algunas edificaciones están adosadas.
EliminarYa veras en próximas entradas.
Saludos.